Bien, por fin, tras mucho tiempo posponiéndolo, vamos a pincholandia, digo a Barx (Valencia), en la montaña que hay encima del pueblo, que está cubierta de tojo pinchudo (de ahí el nombre de pincholandia), y en donde el año pasado mis piernas, tras varias horas buscando la boca de la sima A-10, acabaron acribilladas a pinchazos de los tojos y demás arbustos pinchudos que habitan dichas lindes. Por algo la sima fue descubierta hace pocos años, tras un incendio que dejó pelado el monte... está tan escondida que si no sabes donde está, o no llevas un buen GPS cargado de las coordenadas correctas, no la encuentras, ni lo intentes :-P
El paraje está lleno de agujeros, además de la A-10 está la sima Pilar, que visitamos el año pasado, Aldaya y otras muchas, todas bastante cerca unas de otras. Avenc Pilar resultó ser muy estrecha, y nos han comentado que la Pablo Puchol es bastante mejor, así que estábamos decididos a volver, y así lo hacemos Juanfe, Nuria y rover, eso sí, con la intención de hacer tope, continuando con la tradición que comenzaron Pedrito y Juanfe la semana pasada en la SC-16 (a ver cuánto dura, jejeje).
Ir a las simas de Barx no es cosa fácil, la pista que remonta la montaña es muy escarpada, y el año pasado estaba en muy mal estado, tan malo que tardamos varias horas en subir las cuestas y llegar hasta el "parking" de las simas con los dos coches normalitos que llevábamos. Este año disponemos de todo terreno, así que vamos muy contentos a atacar la pista... y nos encontramos con que está recién arreglada!! Cuando haya alguna que otra tormenta supongo que el agua volverá a dejarla como antes, pero bueno, nos plantamos en la parte de arriba en 5 minutos... y entonces volvemos a la cruda realidad de Barx... a partir de aquí la pista está incluso peor que la otra vez, aunque es llano y por lo tanto menos problemático, tiene piedras y socavones bastante considerables, y bastante recorrido, hasta que llegas al paraje de las simas.
Una vez en el parking nos preparamos y nos dirigimos por la senda hacia la sima, guiados a la perfección por mi gps, eso sí, el muy kpuyo de Juanfe se acordaba perfectamente de cómo llegar... La sima es una raja, una grieta que el agua ha ensanchado y esculpido pozos bastante anchos, nada que ver con sima Pilar. Tardamos bastante tiempo en instalarla, tiene muchos naturales, y exceptuando los primeros pozos hay que buscar los spits con perro y hay muchos roces, que tienes que ir viendo cómo los quitas, que si con desviadores, fraccionando en naturales; uno se nos resistió, no había nada de nada, la roca era conglomerado y colada, así que tuvimos que usar un antiroce... y a la subida vimos el spit que lo salvaba, ains... Cuando se acaban los pozos comienza una rampa angosta y muy empinada, con estrecheces y resaltes, para acabar en una salita pequeña en la que haces tope y en la que está la cota inferior de la cavidad de -220m. ¡Objetivo cumplido!.
Túnel del Sumidors
Al día siguiente tenemos en la recámara una cuevecilla de domingo: El Sumidors. Está en Vallada, bastante cerca, así que la atacamos. La cueva es acuática, la entrada es un sumidero y por toda ella dicurre un río, pero la haremos sin neopreno, nos han comentado que te mojas en un sitio y que es muy corta. La pista para llegar a ella estaba bastante bien, pero porque llevábamos todo terreno, si no seguramente nos hubiéramos quedado tirados antes, es todo tierra muy dada al barro. A pesar de no conocerla llegamos muy bien con las indicaciones del libro, hasta una zona llana donde hay un cartel que indica "Túnel del Sumidors 300m". La senda hasta el sumidero desciende zizageante, para llegar a la confluencia de dos ríos, donde está nuestra cueva.
Tiene un resalte en la entrada, que se baja sin dificultad con la inestimable ayuda de un tronco que hay abajo, y ahí ya ves que hay como dos cuevas: río arriba y río abajo. Primero nos adentramos río arriba, y justo al empezar hay que mojarse un poco porque el techo se baja en un punto, pero no te mojas entero, eso llegará luego. Río arriba la galería acaba cerrándose en una sala de bloques caídos del techo, que nos han comentado que se podía seguir un poco más allá, pero que el paso se cerró recientemente por un desprendimiento.
Río abajo es donde está la diversión... tras un trozo de galería más o menos rectilínea, y en la que vas viendo piedras rojas por la pared, muy chulas, llegas a una salita totalmente cubierta de agua, en la que la única continuación es un paso sifonable, de unos 30cm de altura sobre el agua. Total, que te mojas entero, tienes que meterte hasta la nariz, si no, no pasas. A pesar de ir con el mono de espeleo no pasamos nada de frío, no sé si es que el agua no estaba muy fría, o si la cueva es corta (¿2 horas?) y no paras, pero el caso es que el neopreno no merece la pena, hubiéramos pasado mucho calor. Muchas gracias a nuestros amigos que nos recomendaron hacerla así.
Tras el paso sifonable llegas en seguida a un pozo de 22m, todo en volado, y amplísimo. La cueva no es demasiado grande, las galerías son más o menos de la altura de una persona, frecuentemente te tienes que agachar, y en pocos sitios es más amplia que uno o dos metros... pues bien, el pozo este es inmenso :)
Con más agua que la que llevaba supongo que la bajada es bastante mojada, pero en nuestro caso el agua iba por otro sitio y apenas te caían unas gotas a modo de lluvia. Después de este pozo hay otro más corto, partido en dos. Nosotros bajamos la primera parte, y en la segunda había tres roces, así que no lo terminamos de bajar. No sabemos si es que la gente lleva cuerda más gorda (nosotros llevábamos 9mm) o si pasan de los roces, pero no parecían evitables. Como faltaba poca cueva ya (apenas 20 ó 30 metros), nos dimos la vuelta, totalmente mojados pero contentos. rover
El paraje está lleno de agujeros, además de la A-10 está la sima Pilar, que visitamos el año pasado, Aldaya y otras muchas, todas bastante cerca unas de otras. Avenc Pilar resultó ser muy estrecha, y nos han comentado que la Pablo Puchol es bastante mejor, así que estábamos decididos a volver, y así lo hacemos Juanfe, Nuria y rover, eso sí, con la intención de hacer tope, continuando con la tradición que comenzaron Pedrito y Juanfe la semana pasada en la SC-16 (a ver cuánto dura, jejeje).
Ir a las simas de Barx no es cosa fácil, la pista que remonta la montaña es muy escarpada, y el año pasado estaba en muy mal estado, tan malo que tardamos varias horas en subir las cuestas y llegar hasta el "parking" de las simas con los dos coches normalitos que llevábamos. Este año disponemos de todo terreno, así que vamos muy contentos a atacar la pista... y nos encontramos con que está recién arreglada!! Cuando haya alguna que otra tormenta supongo que el agua volverá a dejarla como antes, pero bueno, nos plantamos en la parte de arriba en 5 minutos... y entonces volvemos a la cruda realidad de Barx... a partir de aquí la pista está incluso peor que la otra vez, aunque es llano y por lo tanto menos problemático, tiene piedras y socavones bastante considerables, y bastante recorrido, hasta que llegas al paraje de las simas.
Una vez en el parking nos preparamos y nos dirigimos por la senda hacia la sima, guiados a la perfección por mi gps, eso sí, el muy kpuyo de Juanfe se acordaba perfectamente de cómo llegar... La sima es una raja, una grieta que el agua ha ensanchado y esculpido pozos bastante anchos, nada que ver con sima Pilar. Tardamos bastante tiempo en instalarla, tiene muchos naturales, y exceptuando los primeros pozos hay que buscar los spits con perro y hay muchos roces, que tienes que ir viendo cómo los quitas, que si con desviadores, fraccionando en naturales; uno se nos resistió, no había nada de nada, la roca era conglomerado y colada, así que tuvimos que usar un antiroce... y a la subida vimos el spit que lo salvaba, ains... Cuando se acaban los pozos comienza una rampa angosta y muy empinada, con estrecheces y resaltes, para acabar en una salita pequeña en la que haces tope y en la que está la cota inferior de la cavidad de -220m. ¡Objetivo cumplido!.
Túnel del Sumidors
Al día siguiente tenemos en la recámara una cuevecilla de domingo: El Sumidors. Está en Vallada, bastante cerca, así que la atacamos. La cueva es acuática, la entrada es un sumidero y por toda ella dicurre un río, pero la haremos sin neopreno, nos han comentado que te mojas en un sitio y que es muy corta. La pista para llegar a ella estaba bastante bien, pero porque llevábamos todo terreno, si no seguramente nos hubiéramos quedado tirados antes, es todo tierra muy dada al barro. A pesar de no conocerla llegamos muy bien con las indicaciones del libro, hasta una zona llana donde hay un cartel que indica "Túnel del Sumidors 300m". La senda hasta el sumidero desciende zizageante, para llegar a la confluencia de dos ríos, donde está nuestra cueva.
Tiene un resalte en la entrada, que se baja sin dificultad con la inestimable ayuda de un tronco que hay abajo, y ahí ya ves que hay como dos cuevas: río arriba y río abajo. Primero nos adentramos río arriba, y justo al empezar hay que mojarse un poco porque el techo se baja en un punto, pero no te mojas entero, eso llegará luego. Río arriba la galería acaba cerrándose en una sala de bloques caídos del techo, que nos han comentado que se podía seguir un poco más allá, pero que el paso se cerró recientemente por un desprendimiento.
Río abajo es donde está la diversión... tras un trozo de galería más o menos rectilínea, y en la que vas viendo piedras rojas por la pared, muy chulas, llegas a una salita totalmente cubierta de agua, en la que la única continuación es un paso sifonable, de unos 30cm de altura sobre el agua. Total, que te mojas entero, tienes que meterte hasta la nariz, si no, no pasas. A pesar de ir con el mono de espeleo no pasamos nada de frío, no sé si es que el agua no estaba muy fría, o si la cueva es corta (¿2 horas?) y no paras, pero el caso es que el neopreno no merece la pena, hubiéramos pasado mucho calor. Muchas gracias a nuestros amigos que nos recomendaron hacerla así.
Tras el paso sifonable llegas en seguida a un pozo de 22m, todo en volado, y amplísimo. La cueva no es demasiado grande, las galerías son más o menos de la altura de una persona, frecuentemente te tienes que agachar, y en pocos sitios es más amplia que uno o dos metros... pues bien, el pozo este es inmenso :)
Con más agua que la que llevaba supongo que la bajada es bastante mojada, pero en nuestro caso el agua iba por otro sitio y apenas te caían unas gotas a modo de lluvia. Después de este pozo hay otro más corto, partido en dos. Nosotros bajamos la primera parte, y en la segunda había tres roces, así que no lo terminamos de bajar. No sabemos si es que la gente lleva cuerda más gorda (nosotros llevábamos 9mm) o si pasan de los roces, pero no parecían evitables. Como faltaba poca cueva ya (apenas 20 ó 30 metros), nos dimos la vuelta, totalmente mojados pero contentos. rover